Una joven mujer es atacada en su dormitorio por una extraña y misteriosa creatura del averno que era mitad caballo y mitad hombre de color azul, tenía ojos rojos y colmillos puntiagudos, se subió sobre ella y no la dejaba moverse.
Primero pensó que era un sueño, pero se despertó y ahí estaba ese terrorífico ser, que la aterrorizó y la hizo llorar, pero venciendo su miedo pudo hacer una oración a Dios nuestro Creador y fue la forma en que pudo zafarse de la creatura.
Sentí un peso enorme en mi espalda que se agudizó, trate de voltear, pero me era complicado
Ante nuestro grupo Mitos y Leyendas de Monterrey y del Mundo llegó esta increíble historia de manera anónima, pero narrando una escena dantesca, veamos lo que sucedió:
La mujer nos cuenta: “Una madrugada estaba dormida, solía hacerlo boca abajo, de pronto sentí un peso enorme en mi espalda que se agudizó, trate de voltear, pero me era complicado, logré girarme un poco y sobre mí estaba algo con la mitad del cuerpo de un caballo y de un hombre color azul (similar al personaje de la muerte en la película la pasión de cristo.)
Tenía los ojos totalmente negros y colmillos puntiagudos, trate de moverme y no podía, me desesperé y empecé a llorar, en mi mente dije es un sueño y rezaba, pero esa cosa sonreía, logré mover una de mis manos y haciendo fuerza me moví de lado, esa cosa se elevó sobre el techo y extendió unas alas enormes, salió volando por la ventana que se abrió de par en par y dejo un aire helado en todo el cuarto, no me moví por un rato, hasta que me levanté a cerrar la ventana, me quedé atontada y no pude dormir más, eran las 3:45 am.
Cuando me levanté encontré una pluma grisácea pegada en un mueble para la ropa, mi mamá no quiso que la quitara hasta que un día se desapareció y nadie supo qué pasó con esa pluma”.
Nunca voy a olvidar el miedo que tuve
Finalmente la joven expresó: “Nunca voy a olvidar el miedo que tuve por muchas noches pensando en que esa entidad del mal volvería a visitarme”.
Realmente estuvimos investigando un poco para ver si existía un ser mítico con las características que señala, un ser mitad hombre de color azul mitad caballo que tenga alas ojos negros, colmillos puntiagudos y que pueda volar, pero ninguno da esas características.
El centauro de la mitología griega es mitad hombre y mitad caballo pero no tiene alas. Otro de los seres que encontramos es el hipogrifo que es un ser de la mitología persa, que es una creatura híbrida de apariencia mitad caballo y mitad grifo que asemeja a un caballo alado con cabeza de águila, pero no se ajusta a todas las características.
Tal vez, podemos pensar que se trate de un brujo o chamán que se convirtió en esa extraña creatura del mal para causarle algún daño o simplemente robarle su energía o pudo haber sido un íncubo o un demonio desconocido.
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